El exministro de Hacienda sostuvo que ‘hay que dejar de ver a los empresarios como opositores’.
En un escenario de estancamiento. Así ve el exministro de Hacienda y profesor de la Universidad de Columbia, Mauricio Cárdenas, la realidad económica del país tras cumplirse los primeros seis meses del 2024, un año que ha estado marcado por grandes retos en la materia y una pronunciada desaceleración, que ha llevado incluso a que el Gobierno replantee sus proyecciones financieras en el corto y mediano plazo.
En charla con Portafolio, Cárdenas Santamaría dio a conocer los pormenores de su punto de vista y advirtió que si bien la economía ha mostrado una fuerza más allá de lo esperado, es necesario adoptar medidas urgentes para evitar que la mala racha se traslade a otros sectores como el mercado laboral.
¿Cuál es su balance al momento?
Estamos estancados. El país está en una situación, económicamente hablando, que no es muy positiva, porque llevamos un buen tiempo con una economía que no crece o crece muy poco. Sin embargo, yo no la calificaría como una recesión, porque las recesiones tienen un comienzo y tienen un fin; son un ciclo completo.
También, en una recesión hay cifras negativas y aquí lo que hay es un estancamiento, que en últimas puede ser más preocupante porque de las recesiones sabemos que se sale con políticas anticíclicas, pero en este caso no hay un choque externo para echarle la culpa del estancamiento.
¿Por qué pasa entonces?
Es más bien un problema interno. Es una caída en el nivel de confianza que afecta a la inversión. Sin duda es menos grave lo que está pasando frente a una recesión, pero es más difícil dejarla atrás, porque como ya lo subrayé, está basado en la confianza y mientras no cambien los parámetros que generan esa confianza, pues no va a haber una reactivación de la economía.
¿Cómo llegamos a esto?
Acá podemos decir que la raíz no es tanto la política económica, curiosamente, porque la política económica no debería estar generando la pérdida de confianza. La política monetaria, la política fiscal, han sido hasta ahora un factor de confianza, porque se acogen a los parámetros de lo que conocemos en Colombia como el marco de política económica.
Curiosamente lo que está generando la desconfianza es otra cosa. Son los anuncios constantes del Gobierno sobre reformas y de cambios a las reglas de juego, que por supuesto afectan el clima de inversión y afectan el nivel de apetito de los empresarios por la inversión. En conclusión, no es política económica, es más, las políticas sectoriales que buscan como elemento transversal en todos los sectores, estatizar más la economía, o sea, restringir el margen de maniobra del sector privado.
¿Ha resistido la economía más de lo debido?
El consumo ha estado muy resistente, o sea, el consumo de los hogares ha estado muy sólido y eso ha ayudado a que las cifras económicas no sean tan malas. Lo que ha estado más volátil o más afectado es la inversión. Ese es un componente importante de la economía, pero lo dominante en una economía es el consumo.
Entonces, mientras el consumo de los hogares se haya mantenido estable y sólido, pues las cosas en Colombia no han sido tan graves.
¿Cuánto tiempo más aguantará?
No indefinidamente. Si el mercado laboral empieza a debilitarse se vuelve más difícil para los hogares mantener y sostener su nivel de consumo. No olvidemos que algo que ha ayudado a sostener el consumo, y de lo que se habla poco, es el apoyo que han recibido los ingresos de los hogares en Colombia por cuenta de las remesas, cuyo crecimiento ha sido realmente espectacular.
Tan pronto el mercado laboral se deteriore, e indiscutiblemente se va a deteriorar si la economía no crece por encima del 3%, habrá una caída en el consumo y por consiguiente, en la dinámica económica. Con una economía creciendo al 1% o por debajo del 1%, el mercado laboral se va a afectar sin duda alguna y en ese momento el consumo se afecta y ahí la situación económica se deteriora aún más.
¿Cómo recomponer el rumbo?
Lo más importante sería un cambio de actitud del Presidente (Gustavo Petro) hacia el sector privado. Verlo más como un aliado que como un opositor. El sector privado le incomoda a este Gobierno, no le gusta el papel del sector privado en la salud, en las pensiones, en la infraestructura, en los servicios públicos.
Con ese modelo, el Presidente va a acabar haciéndole un gran daño a la economía, porque esta inversión del sector privado ha sido muy importante. Sin embargo, no espero que se vaya a cambiar de discurso. Por el contrario, tengo toda la impresión de que este es un Gobierno que ante la adversidad de las nuevas cifras económicas se va a radicalizar y esa radicalización va a hacer aún más daño.
¿Qué hacer entonces?
Esta respuesta va más por el lado del sector privado, que tiene que tomar decisiones audaces para sostener la economía a flote. Por ejemplo, una decisión como la de Bancolombia de bajar las tasas del crédito hipotecario al 10%, así sea a pérdida, es una decisión muy importante. Ese tipo de cosas van a ayudar mucho a que la economía no se descuelgue más de la cuenta y no haya una crisis.
A todos nos conviene que no haya una crisis porque en una crisis se destruyen empresas y es difícil volverlas a crear y en una crisis a lo mejor el Gobierno encuentra la fórmula para pescar el río revuelto y declarar una emergencia y alrededor de esa emergencia tomar medidas como, por ejemplo, la convocatoria a una Constituyente.
¿Le preocupa la reforma laboral?
Va a ser un tema central, pero personalmente creo que es una reforma a la que le quitaron muchas cosas, pero todavía tiene muchos problemas. Entonces, ya es menos grave de lo que era al comienzo, pero sigue siendo una reforma que, en términos generales, hoy por hoy no le haría ningún beneficio a la recuperación de la economía.
Información extraída de: https://www.portafolio.co/economia/finanzas/exministro-mauricio-cardenas-afirma-que-los-empresarios-evitaran-que-la-economia-empeore-608082