Este centro de estudios económicos y sociales, sostiene que todo empieza por optimizar el gasto público.
Colombia enfrenta un escenario económico complejo en el que coinciden un deterioro fiscal profundo, una caída histórica de la inversión y persistentes niveles de pobreza y partiendo de esta premisa, el centro de investigación económica y social Fedesarrollo, presentó este lunes -1 de diciembre- una estrategia para atender estas emergencias de forma simultánea.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, señaló al respecto que, lo primero a reconocer es que el país transita por una coyuntura marcada por un “deterioro fiscal sustancial, una tasa de inversión baja y un preocupante registro de pobreza”, que exige reformas estructurales inmediatas, que no solo entiendan lo que está pasando, sino que se enfoquen en las necesidades de las finanzas públicas.
En primer lugar, desde el frente fiscal, Fedesarrollo advierte que el déficit promedio entre 2020 y 2025 alcanzó “6,4% del PIB”, un nivel que supera ampliamente los estándares históricos y que ha puesto a la deuda pública en una trayectoria ascendente y resalta que la deuda neta llegó a “59,3% del PIB en 2024”, lo que aumenta el riesgo de incumplir los límites de la regla fiscal y restringe el margen de maniobra de la política económica.
Apretarse el cinturón
Por eso, el ajuste al gasto se convierte en el primer fundamento de la estrategia y para lograrlo, Fedesarrollo plantea la eliminación de subsidios que considera regresivos o poco eficientes, especialmente aquellos asociados al diésel y los biocombustibles, lo que representaría un ajuste cercano a “0,5% del PIB”.
También propone mejorar la eficiencia de los recursos destinados a salud y educación, lo que permitiría un ahorro adicional de “0,3% del PIB”, junto con una focalización más rigurosa de los subsidios de servicios públicos; argumentando que estos cambios, sumados a un control del gasto en personal, generan un ajuste directo de “2,2% del PIB”.
Sin embargo, el alivio fiscal por sí solo no resolvería el estancamiento económico y Fedesarrollo enfatiza que la inversión se encuentra en “16,1% del PIB”, una cifra que califica como el nivel más bajo en dos décadas, incluso por debajo de los registros observados durante la pandemia.
Por esa razón, la estrategia incluye un componente tributario diseñado para incentivar la inversión privada sin sacrificar progresividad. El centro propone reducir el umbral para declarar renta a “700 UVT”, ampliando la base a 2,3 millones de declarantes y plantea además 11 tramos progresivos para personas naturales, con tarifas que oscilan entre 0% y 39%, mientras que para las empresas propone una tarifa corporativa diferencial según tamaño.
“Se propone reducir gradualmente la tarifa nominal del 35%, eliminando sobretasas sectoriales e introduciendo un esquema de tarifas progresivas según el tamaño de la renta líquida gravable (24% para pequeñas, 28% para medianas, 33% para grandes). También se eliminaría el impuesto al patrimonio. Aunque estas medidas tienen un costo fiscal de 0,7% del PIB, su efecto sobre la inversión y el crecimiento compensaría la menor recaudación inicial”, dice el documento.
El tercer pilar de la propuesta se enfoca en mejorar la focalización del gasto social; punto en el que Fedesarrollo identifica fallas que hacen que “30% de las transferencias lleguen a hogares no pobres”, lo que genera ineficiencias y limita el alcance de los programas y para corregirlo, el centro propone una transferencia única para menores de 65 años en pobreza extrema, equivalente a 1,5 líneas de pobreza, con la cual sería posible ampliar la cobertura de “5,8 a 9 millones de personas” sin aumentar el presupuesto.
“En materia de inclusión productiva, se propone reformar las contribuciones a salud de trabajadores independientes con tarifas progresivas que inicien en 0% para quienes ganan menos de un salario mínimo; crear un seguro de desempleo acotado financiado con recursos de las cajas de compensación; y eliminar barreras a la formalización en el sector rural”, agregaron.
De implementarse la estrategia completa, Fedesarrollo estima efectos significativos sobre el bienestar y el crecimiento; ya que con un retorno estricto a la regla fiscal y el fortalecimiento del clima de inversión, la inversión podría aumentar de 16% a “23% del PIB” en 2031, impulsando el crecimiento en “1,1 puntos adicionales”.
Así mismo, en materia social, el plan permitiría reducir la pobreza monetaria en “2,6 puntos porcentuales”, la pobreza extrema en “2,9 puntos” y disminuir el índice de Gini en “2,1 puntos”, lo que implica una mejora sustancial en equidad y con todo esto, el centro concluye que Colombia no puede abordar sus desafíos de manera fragmentada, sino que requiere una estrategia coherente que articule gasto, inversión y protección social.
Información extraída de: https://www.portafolio.co/economia/crecimiento/la-estrategia-de-fedesarrollo-para-corregir-el-deficit-fiscal-reactivar-la-inversion-y-reducir-la-pobreza-484022
Así mismo, en materia social, el plan permitiría reducir la pobreza monetaria en “2,6 puntos porcentuales”, la pobreza extrema en “2,9 puntos” y disminuir el índice de Gini en “2,1 puntos”, lo que implica una mejora sustancial en equidad y con todo esto, el centro concluye que Colombia no puede abordar sus desafíos de manera fragmentada, sino que requiere una estrategia coherente que articule gasto, inversión y protección social.
Información extraída de: https://www.portafolio.co/economia/crecimiento/la-estrategia-de-fedesarrollo-para-corregir-el-deficit-fiscal-reactivar-la-inversion-y-reducir-la-pobreza-484022



