Febrero dejó una mala pasada al balance de los títulos de tesorería (TES) de Colombia en los que tienen inversiones los fondos de capital extranjero. El saldo de ventas netas en TES por parte de estos fue de $4,2 billones, el mayor dato reportado en un mes.
Así, el saldo de inversiones extranjeras en nuestra deuda pública descendió a $116,3 billones, tras estar en $120,4 billones en enero.
El director de la Dirección de Crédito Público del Ministerio de Hacienda, José Roberto Acosta, aseguró que este comportamiento se explicó “como resultado de una situación externa donde el apetito de riesgo por economías emergentes como Colombia se desaceleró por el aumento abrupto de las tasas del tesoro americano por encima del 4%”.
Por ello, según Acosta, los inversionistas extranjeros salieron de $4,2 billones en títulos de deuda pública en nuestro mercado local en febrero, “después de un excelente mes de enero, donde ingresaron cerca de $2,5 billones”.
(‘La protección a la inversión extranjera en Colombia puede mejorar’).
Pero esta lectura parece no convencer del todo a los expertos, que lo relacionan en mayor medida con los mensajes que ha venido dando el Gobierno en temas como la reforma pensional, entre otros.
“Es un tema preocupante, que debe generar alertas al equipo económico del gobierno, y se debe monitorear en los próximos meses. Es claro que los tenedores de deuda internacionales ven con ojos de preocupación toda la incertidumbre hay en el país, las reformas, los mensajes contradictorios, todos estos son factores que llevan a los inversionistas a tomar esas decisiones”, comentó Anwar Rodríguez, vicepresidente del centro de estudios económicos Anif.
Según Rodríguez, si los flujos de capital comienzan a afectarse “vamos a estar más expuestos a los vaivenes de la situación internacional”.
Rodríguez enfatizó en que el hecho de que los inversionistas extranjeros “se estén deshaciendo de sus posiciones de títulos de deuda colombianos” agrava una coyuntura que ya enfrenta el país, pues la cuenta corriente refleja un alto déficit externo y para 2022 se ubicó en 6,2% del PIB.
De otra parte, el jurista Luis Guillermo Vélez alertó que la situación es delicada por el efecto que podría tener en la tasa de cambio. “Estos inversionistas tienen que vender sus títulos de deuda en el mercado local, cambiarlos a dólares y sacar las divisas del país. Si eso aumenta, habría una presión inmensa para la tasa de cambio”.
Vélez también comentó que normalmente los TES los compran los bancos y los fondos de pensiones y que la reforma pensional impactaría ese mercado. “La mayoría de plata de los fondos se va a deuda pública. Sin ese flujo se va secar el mercado de TES, y eso asusta a los inversionistas porque no hay quien les compre, por eso están sacando la plata del país”, cuestionó.
También Juan David Ballén, director de Análisis y Estrategia de la comisionista Casa de Bolsa recalcó que “los fondos de pensiones habrían sido quienes compraron los TES que vendieron los extranjeros en febrero” y dijo también que “si marchitan a los fondos de pensiones, no habrá quien compre los TES, y las ventas de extranjeros harían que las tasas y el dólar sigan subiendo”.