Cultivos como el del café se han visto favorecidos por la demanda y precios internacionales.
El crecimiento económico de Colombia en tercer trimestre fue de 2% y la agricultura fue uno de los motores que tuvo más allá de que el dato fue decepcionante.
El sector agropecuario, por su parte, creció un 10,7% y acumuló a septiembre un crecimiento del 8,9%. Aunque el agro, como proporción del PIB real nacional, es solo una fracción.
Un reciente análisis del Grupo de Investigaciones Económicas de Bancolombia explica que la agricultura se ha visto favorecida por la demanda internacional y que el consumo interno no atraviesa su mejor momento.
“Mientras el café y los otros cultivos crecen principalmente a partir de una producción destinada a la exportación, la industria local de alimentos procesados sigue mostrando cifras que reflejan un mal momento en el consumo”, detalla el informe del grupo financiero.
Las variaciones anuales del PIB real del tercer trimestre de elaboración de grasas y aceites, productos lácteos, productos de molinería y cacao y confitería fueron todas negativas: -8,2%, -3,6%, -2,9% y – 1,6%.
Con una variación anual del 33,6% en el PIB real del tercer trimestre de este año, el sector cafetero recupera terreno perdido en años anteriores y acumula al tercer trimestre un crecimiento del 17,9%.
El valor agregado que surge de la transformación (desde la trilla hasta los procesos de torrefacción) también avanza a buen ritmo, con un crecimiento del 27,2% y 12,4% para el dato trimestral y acumulado a septiembre, respectivamente.
Con una variación anual del 33,6% en el PIB real del tercer trimestre de este año, el sector cafetero recupera terreno perdido en años anteriores y acumula al tercer trimestre un crecimiento del 17,9%.
El valor agregado que surge de la transformación (desde la trilla hasta los procesos de torrefacción) también avanza a buen ritmo, con un crecimiento del 27,2% y 12,4% para el dato trimestral y acumulado a septiembre, respectivamente.
Riesgos para 2025
Durante agosto, estuvo latente una posible huelga por parte de los estibadores de los principales puertos de la Costa Este de EE.UU. Las autoridades del país llegaron a un acuerdo sobre salarios, pero quedó pendiente discutir la propuesta de automatización de algunas labores.
La última vez que se presentó esta situación fue en 1977, cuando duró 44 días y tuvo un impacto en el comercio estadounidense de US$1 billón.
En esta ocasión, este riesgo podría materializarse de nuevo el 15 de enero de 2025, fecha en la cual las partes involucradas quedaron de volverse a sentar a negociar.
Aunque una nueva huelga podría tener impactos negativos generalizados en el transporte marítimo, los analistas hablan de un mayor impacto en la carga contenerizada.
Bancolombia asegura que en general, no sería una buena noticia para nadie. De todas maneras, analizando las exportaciones agroindustriales, no existe ningún sector cuyas ventas se concentren fuertemente en esos puertos.
El más relevante sería la lima Tahití; durante el primer bimestre del año 2023 (asumiendo que el paro pudiera durar dos meses), este sector envió hacia esos puertos alrededor del 63% de las exportaciones del bimestre y alrededor del 8% de las exportaciones totales anuales.
Debate normativo
Hasta hace poco, se esperaba que el primero de enero de 2025 fuera el inicio en la aplicación de la directriz europea antideforestación (EUDR).
Esta exige que los operadores que compren y vendan soya, carne de res, aceite de palma, madera, cacao, café y caucho natural (así como sus derivados) certifiquen que estos productos no fueron generadores de deforestación.
Una fuerte presión de países exportadores y de gremios transformadores europeos, frente a la falta de claridad en la norma, ha llevado a que se proponga suspender la fecha de inicio de aplicación.
Según Bancolombia, “para Colombia, la norma antideforestación europea tiene mayor impacto en el cultivo de café, aunque para el aceite de palma y el cacao también es relevante”.
De las actividades mencionadas, el café en Colombia es la que tiene mayor dependencia del mercado europeo: del café producido en 2023, el 93% fue exportado, y de ese valor, el 26% fue al continente europeo.
En el caso de la palma de aceite, la relevancia del mercado europeo es actualmente baja, dado que, de lo que se exporta (30%-35% de lo producido), solo se envía a ese continente entre una cuarta y una quinta parte del volumen.
Finalmente, Bancolombia advierte que, para el cacao, es algo para ir abordando desde hoy, de cara al futuro, debido al alto potencial del país para exportar cacao fino y de aroma. “En el mercado del cacao, Europa está dispuesta a pagar mayores precios por un producto de calidad y sostenible”, concluye.
Información extraída de: https://www.bloomberglinea.com/latinoamerica/colombia/agro-colombiano-esta-creciendo-gracias-a-la-demanda-que-llega-desde-el-exterior/