Balance fiscal de octubre: Carf alerta por más gasto y menos caja

Compartir

De acuerdo con el Comité de Regla Fiscal, la financiación de corto plazo ya representa el 20,6% de la deuda interna.

El pulso de las finanzas públicas en Colombia sigue mostrando signos de tensión y lejos de llegar al punto de calma que persigue el gobierno Petro desde la caída en el recaudo tributario del 2023, la realidad es que se sigue dependiendo de la deuda, los recursos del Estado son limitados y poco a poco se debe correr más el límite fiscal.

De acuerdo con el más reciente seguimiento fiscal del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf), con corte a septiembre, el panorama se marca por un gasto que continúa creciendo a un ritmo más acelerado que el recaudo, mientras la deuda pública alcanza su nivel más alto en la historia reciente y la caja del Tesoro Nacional se mantiene por debajo de los mínimos históricos.

En su actualización de las cuentas fiscales con corte a octubre, el informe muestra que el gasto fiscal total del Gobierno Nacional Central llegó al 16,8% del PIB a septiembre, mientras el gasto primario, que excluye los pagos de intereses, representó el 14,2%. Ambos indicadores se ubican por encima del promedio observado entre 2021 y 2024, reflejando un comportamiento expansivo del gasto que ya cubre más del 70% de la meta anual prevista en el Marco Fiscal de Mediano Plazo.

En contraste, si bien los ingresos crecen, de acuerdo con el Carf, no están teniendo la fuerza suficiente para sostener ese ritmo, dado que el recaudo bruto acumulado a agosto fue de $197,3 billones, un 10,9% más que en el mismo periodo del año pasado, equivalente a un aumento real del 5,3%.

Sin embargo, esa cifra apenas representa el 64,6% de la meta anual de la Dian, fijada en $305 billones; mientras que si se descuentan las devoluciones y los pagos con títulos, el recaudo neto asciende a $182 billones de pesos, 8,9% más que en 2024, pero $3,6 billones por debajo de la meta establecida en el Marco Fiscal.

Un avance irregular

El Carf también advirtió que la dinámica de los impuestos refleja un desempeño desigual en el que mientras el recaudo por renta se quedó $3,7 billones corto frente a lo esperado y el IVA interno estuvo $0,4 billones por debajo de su meta, los gravámenes externos, como aranceles y tributos a las importaciones, se ubicaron $0,9 billones por encima de lo proyectado.

Aun así, el crecimiento promedio de los ingresos tributarios, medido en los últimos doce meses, es de apenas 8%, muy lejos del 14,9% necesario para cumplir la meta del Gobierno; por lo que resaltaron que el aumento del gasto no solo responde a mayores compromisos en funcionamiento, sino también a las presiones estructurales del presupuesto.

Para explicar mejor su punto, acotaron que a septiembre, la ejecución de obligaciones del Presupuesto General de la Nación fue de 59,7%, 3,2 puntos más que un año atrás, pero con rezagos en inversión, cuya ejecución solo alcanza el 41,1% de lo apropiado. Además, el pago de la reserva presupuestal, recursos comprometidos y no ejecutados de vigencias anteriores, ascendió a $39,4 billones de pesos, lo que representa el 76,2% del total y anticipa una reserva elevada al cierre del año fiscal.

Por último, en el frente de la deuda, las alertas son claras, ya que el saldo de la deuda bruta del Gobierno Nacional llegó al 63,9% del PIB en septiembre, un aumento de 1,8 puntos porcentuales frente a agosto y el nivel más alto registrado en años; mientras que el incremento mensual fue de 3%, impulsado principalmente por el crecimiento de la deuda interna, que hoy representa el 71% del total.

Dentro de esta, los Títulos de Tesorería de corto plazo (TCOs) tuvieron un aumento del 50,5% solo en septiembre, lo que eleva su participación en la financiación interna al 20,6%, el doble del promedio histórico reciente.

Así las cosas, el uso intensivo de deuda de corto plazo, junto con el aumento en los pagarés del Tesoro, refleja la presión sobre la caja del Estado, dado que aunque el saldo de TES de largo plazo alcanzó un máximo de $630 billones, lo que da cierta estabilidad a la estructura de deuda; mientras que la creciente dependencia de instrumentos de vencimiento rápido implica mayores riesgos de refinanciación y volatilidad en el costo del endeudamiento.

Con todo lo anterior, el Carf observa un escenario en el que el gasto crece más rápido que los ingresos, la deuda pública continúa en ascenso y la disponibilidad de caja permanece ajustada. El Gobierno ha logrado mantener el recaudo en terreno positivo, pero el ritmo no basta para cerrar la brecha fiscal.

Con un nivel de endeudamiento en máximos históricos y un uso intensivo de financiamiento de corto plazo, el espacio para maniobrar se reduce y en los meses que restan de 2025, la sostenibilidad fiscal dependerá de que la caja resista y el gasto logre moderarse sin afectar los compromisos sociales y de inversión.

Información extraída de: https://www.portafolio.co/economia/crecimiento/carf-alerta-por-aumento-del-gasto-publico-y-caida-de-la-caja-fiscal-en-colombia-642287

Compartir

Comments are closed.

Financial advisor showing payments plan to young couple

Estamos listos para resolver sus dudas