Adicionalmente, según los expertos, el país está viviendo un desacoplamiento tributario con el ritmo actual de crecimiento.
El Banco de Bogotá presentó esta semana su actualización de proyecciones económicas para Colombia de cara a lo que resta del 2024 y lo que viene para el próximo año, y advirtió que el país está entrando en un escenario poco favorable para frentes como el recaudo tributario y el mercado laboral, debido a las dinámicas apoyadas en el consumo que están observando por estos días.
Camilo Pérez, jefe de Investigaciones Económicas del banco, aseguró que pese a los retos que enfrenta la economía local, hay que destacar que los resultados obtenidos en indicadores como el Ise o el PIB, han sido mejores de lo esperado y que lo que se tiene que hacer es prestar atención a las particularidades de los datos, para entender cuáles son los frentes de la economía que requieren una atención especial.
No obstante, sus proyecciones de crecimiento estuvieron en la misma línea de gran parte del mercado, apuntando a un 1,6% para el 2024 y del 2,6% para el 2025; haciendo énfasis en que dependiendo de las decisiones que se tomen hacia adelante para mitigar los riesgos fiscales y recuperar la inversión, estos datos podrían ser mejores de lo esperado.
“Lo que hemos visto es que se recupera más el consumidor, que la economía en general. Después de todo ese periodo, pandemia y post pandemia, por fin, se han ajustado los patrones de consumo y estamos apuntándole ya a un comercio al por menor, a ventas minoristas, con crecimientos, después de mucho tiempo de caídas, generando una perspectiva favorable”, dijo Pérez.
Por otra parte, reportan que los sectores de servicios, más intensivos en mano de obra que los sectores tradicionales, han mitigado el deterioro del mercado laboral, lo cual para ellos es bueno, pero insuficiente ya que la economía está creciendo lentamente, debido a que pilares como la industria y la construcción y el empleo siguen en rojo y necesitan cuanto antes un plan de reactivación.
“Si lo que crece más es servicios, pero lo que más genera impuestos normalmente eran los sectores tradicionales, en el pasado por lo menos, pues entonces mi tema tributario se va a descalzar un poco. Ahí hay una razón de por qué estamos viendo el recaudo tan flojo como lo vemos”, acotaron desde el Banco de Bogotá.
Mercado laboral
Estos analistas también pasaron revista a la generación de empleo en Colombia y manifestaron que si bien la administración pública ha impulsado el empleo en meses recientes, la tendencia muestra una desaceleración, especialmente en los últimos datos de agosto y septiembre, donde el sector público ha reducido su contribución a la creación de empleo. Así mismo, dijeron que sus cuentas muestran un deterioro en el mercado laboral.
“Esos cambios estructurales de la economía nos llevan a una situación en la que el deterioro del empleo es muy pequeño, mucho más pequeño de lo que uno hubiera anticipado con los modelos que tenemos, porque si la economía se acelera, pues eso implica ese empleo nuevo que finalmente no se está dando. La realidad es que ese deterioro sí se dio y ahora toca lidiar con eso”, agregaron.
Para explicar mejor lo que está pasando con el empleo en Colombia, explicaron que el ajuste mencionado se debe al recorte de gasto público que terminó impactando las dinámicas de generación de este renglón, aunque sugieren que no se puede pasar por alto que el número de personas que abandonaron el mercado laboral también ha aumentado, lo que podría elevar las tasas de desempleo si estas personas no encuentran empleo rápidamente.
“Básicamente muchas personas que estaban en el mercado laboral, por una u otra razón llevan mucho tiempo buscando empleo y se cansan de hacerlo. Es decir, hay buenas señales pero la variación de fuerza laboral es muy grande. En un solo mes tenemos que 250.000 personas salieron de este grupo, pero si mañana deciden volver, eso inmediatamente aumenta el desempleo”, sostuvo Pérez.
Malas percepciones
Otro de los puntos que para el Banco de Bogotá merece una atención especial, tiene que ver con la percepción de los empresarios y la confianza inversionista, ya que para ellos no pasa por su mejor momento y exige un cambio de la forma como se ha venido tratando, ya que se traduce en una fuga de capitales que no le hace bien a la economía.
Dicho esto, Camilo Pérez plantea una paradoja en la que desde su óptica, la percepción de los empresarios sobre la economía ha sido consistentemente negativa en los últimos dos años, manteniéndose por debajo del promedio histórico. Sin embargo, reconoce que el sentimiento en redes sociales hacia el presidente ha sido levemente positivo, mostrando una desconexión entre la percepción empresarial y la percepción pública.
“Esto sí me deja muy pensativo sobre el próximo ciclo electoral y sobre qué tanto impacto económico puede haber de aquí en adelante por estos cambios sociopolíticos que estamos evidenciando. Todo eso requiere que se mire con cuidado, porque será fundamental para lo que venga hacia el futuro”, dijo el economista.
Para el Banco de Bogotá, no es sólo Colombia, sino la economía global la que enfrenta riesgos hacia el futuro, poniéndo como ejemplo lo que sucede con el estancamiento en Europa (especialmente Alemania) y la desaceleración en China, que para ellos podrían afectar el crecimiento en Colombia. Además, el entorno geopolítico, junto con la posibilidad de paros locales, genera incertidumbre.
Por último, en lo concerniente a la inflación, indicaron que si bien se ha reducido, sectores como los servicios y arrendamientos, disminuyen lentamente; por lo que esperan que este indicador cierre en torno al 5,3% ó 5,4% para 2024 y se acerque al 4% en 2025, aunque no descartan que los objetivos inflacionarios del Banco de la República podrían no cumplirse, planteando desafíos para la política monetaria.
“Los incrementos en el precio del diésel no se consideran un riesgo significativo debido a su gradualidad. Sin embargo, la falta de lluvias y el bajo nivel de los embalses representan un riesgo para el sector energético, lo que podría impactar la economía”, manifestaron.
El informe sobre el estado actual de la economía cerró haciendo un llamado a que se mantenga un seguimiento detenido de los diferentes aspectos ya mencionados, advirtiendo que si bien hay mejoras notables en el ritmo de crecimiento, esto no es señal de victoria y exige, por el contrario, un mayor compromiso de las autoridades monetarias.
Información extraída de: https://www.portafolio.co/economia/crecimiento/que-viene-para-la-economia-del-pais-en-lo-que-falta-del-2024-616981