Proyectos pensional y salud representarían un gasto adicional de 0,9% del PIB. Un deterioro podría llevar a una calificación negativa.
La calificadora de riesgo Fitch Ratings aseguró que las nuevas metas fiscales de Colombia, presentadas en el Plan Financiero 2024 son “consistentes con los pronósticos fiscales” que presentó en diciembre de 2023.
No obstante, la firma advirtió que, pese al recorte de la relación de la deuda como parte del PIB en 2023, es probable que este año resurja una presión al alza “que podría identificarse si se implementan las reformas planificadas en salud y pensiones”.
Según el documento presentado, los actuales pronósticos de Fitch no incorporan los costos adicionales de las reforma a la salud y pensional de Petro. En caso de que se aprueben, podrían representar un gasto adicional de 0,9% del PIB en conjunto, si se implementan según lo planeado.
Vale recordar que las reformas mencionadas aún están en discusión, la cual se retoma la próxima semana con el reinicio de actividades del Congreso de la República.
Otros mensajes de Fitch
En un boletín de prensa, los resultados preliminares del Plan de Financiamiento 2024 prevé que el mayor objetivo de déficit para 2024 está en un “ajuste realista” a la sentencia de la Corte Constitucional sobre la no deducibilidad de las regalías y “la dificultad” para generar los ingresos previstos a partir de las nuevas medidas tributarias, como las disputas de litigio.
Julio Romero, economista jefe de investigaciones económicas de Corficolombiana, aseguró que un punto a destacar es que para la calificadora el país se mantiene con perspectiva estable en BB+.
“Es uno de los principales mensajes. En el resto del pronunciamiento de Fitch hace una descripción muy en línea con la que hicimos nosotros en Corficolombiana respecto a la caída en los ingresos y cómo el Gobierno está ajustándose”, puntualizó Romero.
De acuerdo con Fitch, sin cambios importantes en la política fiscal, los déficit fiscales se mantendrán en aproximadamente 4,5% del PIB en el mediano plazo. Aseguran que esto estaría “por encima del nivel requerido por la regla fiscal, que tanto el presidente Gustavo Petro como el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, han dicho que podría ajustarse para permitir un mayor gasto contracíclico”. Sin embargo, sostienen que no está claro si el Gobierno legislaría para tal propósito.