Inversores mantienen su fe en los TES pese al ruido fiscal del Gobierno

Compartir

Analistas prevén estabilidad en los rendimientos de los bonos soberanos, aunque advierten que hay riesgos latentes.

El mercado de deuda pública colombiano atraviesa una etapa inusual en la que, en medio de la incertidumbre fiscal y del ruido político, los inversionistas parecen más confiados que temerosos o por lo menos eso deja claro la reciente sobredemanda en las subastas de Títulos de Tesorería (TES) y la estabilidad de las tasas en los tramos medios y largos de la curva que confirman que el apetito por estos papeles sigue intacto.

De acuerdo con analistas de Itaú Colombia, Bancolombia y Fedesarrollo, el desempeño reciente de los TES refleja una mezcla de factores técnicos, expectativas macroeconómicas y señales de gestión activa por parte del Ministerio de Hacienda y aunque persisten riesgos, los expertos coinciden en que el mercado ha logrado mantener una base sólida de confianza, incluso en un año en el que la regla fiscal no se cumplirá y los desbalances del gasto público son evidentes.

Una curva que se estabiliza

En primer lugar, Sharon Téllez, analista de Itaú Colombia, explica que el comportamiento reciente de la curva de TES en pesos ha sido mixto y predominantemente lateral, después de las fuertes valorizaciones observadas tras la presentación del Marco Fiscal de Mediano Plazo; destacando que ese documento, junto con las operaciones de manejo de deuda lideradas por la Dirección de Crédito Público, dio un impulso considerable al mercado.

“La curva en pesos tuvo valorizaciones cercanas a 120 puntos básicos, sobre todo en los nodos más largos. Desde entonces, los movimientos se han moderado y el mercado entró en una fase de estabilidad dentro de rangos estrechos”, afirma.

El fenómeno, dice Téllez, responde a una combinación de factores como la madurez de las operaciones de canje y recompras ejecutadas por el Gobierno, la expectativa de menores tasas internacionales y la percepción de que la deuda local sigue siendo una opción atractiva frente a otros activos de riesgo similar.

“Pese a los ruidos sobre la sostenibilidad fiscal, los inversionistas continúan viendo a los TES como instrumentos sólidos y rentables. De hecho, la sobredemanda que vimos en la última subasta fue históricamente alta, lo que refleja esa confianza en la deuda colombiana”, añade la analista.

Un apetito firme

Por otra parte, los datos del Ministerio de Hacienda van de la mano con estas interpretaciones, dado que en la más reciente colocación de TES tasa fija, con referencias a 2029, 2035, 2040, 2046 y 2058, la demanda fue 6,85 veces superior a la oferta, el nivel más alto jamás registrado. Este comportamiento, analizado por el equipo de Investigaciones Económicas de Bancolombia, muestra un apetito sostenido por la deuda local, tanto de inversionistas domésticos como extranjeros.

En su informe semanal, Bancolombia destaca que, aunque el resultado de la subasta generó una leve desvalorización promedio de 8 puntos básicos en el mercado secundario, el interés por los papeles del Gobierno sigue siendo notable. Los títulos más afectados fueron los TES 2040, donde se concentró buena parte de la presión, mientras que las referencias 2046 y 2058 registraron adjudicaciones significativas, con precios por debajo de la par, lo que sugiere una estrategia táctica del Gobierno para fortalecer el stock de nuevas emisiones.

El informe añade que el tramo medio-largo de la curva sigue siendo el más dinámico y que los inversionistas institucionales, como fondos de pensiones y aseguradoras, han mantenido una presencia constante en las subastas, lo que aporta estabilidad al mercado.

Aun así, el consenso es claro frente a que el mercado se encuentra en una calma vigilante y las próximas semanas estarán marcadas por factores que podrían alterar la actual estabilidad, ya que nuevas operaciones de manejo de deuda, las decisiones de política monetaria internacional y los riesgos políticos domésticos.

Téllez subraya que la Dirección de Crédito Público ha manifestado su intención de seguir reduciendo el costo de la deuda mediante la recompra de títulos con cupones altos, tanto en pesos como en dólares y explicó que estas operaciones, que buscan mejorar los indicadores de deuda/PIB e intereses/PIB, podrían impulsar nuevas valorizaciones si logran mantener la confianza del mercado.

En el frente externo, los analistas coinciden en que la curva del Tesoro de Estados Unidos es un punto clave, ya que “si la nota a 10 años logra consolidarse por debajo del 4%, y la Reserva Federal inicia recortes sostenidos de tasas, el efecto será positivo para los TES colombianos y para la deuda emergente en general”, según explica Sharon Téllez.

Sin embargo, la advertencia es doble y apunta a que una reversión de esa tendencia, por mayores presiones inflacionarias o por tensiones geopolíticas, podría elevar las tasas internacionales y traducirse en mayor prima de riesgo para Colombia, especialmente si el país continúa mostrando debilidad fiscal.

Entre la estabilidad y la cautela

En ese equilibrio entre confianza y riesgo se mueven las expectativas del mercado. Según el Boletín de Opinión Financiera de Fedesarrollo, más de la mitad de los analistas consultados espera que las tasas de los TES 2032 se mantengan entre 11% y 11,5% durante los próximos tres meses, mientras que para los TES 2042 el 60% prevé un rango entre 11,5% y 12%.

De hecho, los datos de Fedesarrollo se podrían analizar desde la concentración de expectativas como un signo de madurez y cautela en la que los agentes de mercado reconocen los esfuerzos técnicos del Ministerio de Hacienda, pero mantienen una visión prudente frente a la sostenibilidad fiscal y a los posibles efectos de nuevas reformas o tensiones políticas.

De esta forma, las percepciones de los analistas apuntan a una conclusión clara respecto a que la deuda pública colombiana conserva un voto de confianza, pero no un cheque en blanco y que los inversionistas locales e internacionales siguen dispuestos a financiar al Gobierno, siempre y cuando la gestión de deuda mantenga su enfoque técnico y la política fiscal no se desvíe hacia la incertidumbre.

El repunte de la demanda en las subastas, las tasas relativamente estables y el atractivo de los rendimientos en el tramo largo de la curva reflejan esa dualidad en la que hay confianza, pero también prudencia y como resume Téllez, “el mercado ha aprendido a convivir con el ruido político; mientras el manejo de deuda siga siendo ordenado, los TES seguirán siendo un refugio atractivo para los portafolios institucionales”.

Mientras tanto, el Gobierno tiene ante sí el reto doble de mantener la disciplina fiscal sin ahogar la reactivación económica, y continuar ejecutando una política de deuda pública que combine prudencia con eficiencia. De esa combinación dependerá que la fe del mercado no se transforme en duda, sino en una apuesta de largo plazo por la estabilidad.

Información extraída de: https://www.portafolio.co/economia/finanzas/confianza-en-los-tes-colombianos-se-mantiene-pese-a-la-incertidumbre-fiscal-del-gobierno-642870

Compartir

Comments are closed.

Financial advisor showing payments plan to young couple

Estamos listos para resolver sus dudas