El IPC pasó la línea de 10% en julio de 2022 y llegó a su pico más alto en marzo de 2023, con un resultado de 13,34%. Desde entonces, viene cediendo lentamente.
Tal como se esperaba, la inflación de diciembre cedió por noveno mes consecutivo y quedó en 9,28% anual, con una variación de 0,45% mensual. Desde hace 17 meses el IPC no bajaba de dos dígitos, pues desde julio de 2022 el dato anual llegó a 10,21%.
Y desde entonces, el indicador empezó a aumentar mes a mes, lo que conllevó a que llegara a su pico más alto de los últimos años en marzo de 2023, con 13,34%, “lo que representa un incremento de 1.185 puntos básicos desde el 1,49% registrado en noviembre de 2020, cuando inició el ciclo alcista”, señaló David Cubides, director de Investigaciones Económicas en Alianza Valores.
Y aunque el resto del año recién culminado la inflación cedió, lo hizo lentamente, porque algunos rubros como transporte y alimentos aportaron con variaciones positivas por cuenta de aumentos de precio en gasolina e insumos.
Para noviembre el dato de este indicador quedó en 10,15% y fue el que se tomó en cuenta para el incremento del salario mínimo de este año, que quedó en 12%, tal como promediaban las expectativas de analistas económicos.
En la más reciente Encuesta Mensual de Expectativas de Analistas Económicos, fechada para diciembre, los 39 expertos esperaban una inflación promedio de 9,49%; mientras el mínimo estaba en 9,15% y el máximo en 9,80%. Lo que deja el resultado final entre las predicciones.
Juan Camilo Pardo, analista de Corficolombiana, explicó que hay que recordar que más allá del resultado, el país se encuentra bajo la narrativa de la desaceleración en el crecimiento del agregado en los precios. “En 2022 los alimentos, por ejemplo, llegaron a una variación anual de 28%, hoy en día la variación de los alimentos ya está en un dígito”.
Para el reporte de diciembre, cuatro ciudades no lograron bajar la inflación a un dígito, se trata de Valledupar (10,69%), Santa Marta (10,50%), Montería (10,48%) y Barranquilla (10,35%). Mientras que las ciudades que cerraron el año con el IPC más bajo fueron Villavicencio (7,19%), Ibagué (7,79%) y Popayán (8,01%).
Las grandes ciudades como Medellín y Bogotá cerraron el año con la inflación por encima del dato nacional, pues la capital de Antioquia quedó en 9,55% y la capital nacional en 9,43%.
Por división de gasto, las que presentaron variaciones más altas fueron transporte (15,42%), restaurantes y hoteles (13,22%), bebidas alcohólicas y tabaco (11,95%).
David Cubides explicó que se proyecta la continuidad de una moderación en la tasa de inflación anual. “Proyectamos una disminución al cierre de 2023 hasta alcanzar una cifra cercana a 6% en 2024. Estas proyecciones se basan en un efecto base en los primeros meses del año, estimando una reducción de 8,5% en enero a aproximadamente 7% a mediados de año”.
Julio Romero, economista jefe de Corficolombiana, aseguró que “vale la pena recordar que hay rubros con un peso relevante en el IPC que se indexarán al dato de inflación anual de diciembre. Aun falta un largo camino por recorrer para normalizar la inflación”.
Aunque la inflación bajó, el pollo subió
Aunque la tendencia y las previsiones del IPC apuntan en picada, el Índice del Pollo Asado subió 5,22% en diciembre. Este indicador, que se acerca al comportamiento de la economía a partir de los precios de un pollo asado entero en siete ciudades capitales del país, muestra que hoy de este plato cuesta, en promedio, $38.667, $1.900 más que hace un mes, cuando la estimación fue de $37.733. Gonzalo Moreno, presidente de Fenavi, dijo que en esta ocasión el aumento no se puede atribuir al costo del pollo, sino a otros ingredientes de la preparación de este plato.
