Los primeros productos ya completaron el aval de Invima y con ello nace un segmento millonario en Colombia
La industria de los alimentos con cannabis en Colombia se abre paso y ya completó un paso esencial para su masificación luego de que varios productos lograran la autorización de comercialización del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), lo que significaría la transición de un negocio artesanal a uno formal y con potencial se convertirse en un segmento millonario.
Este segmento busca abrirse paso en Colombia luego de la expedición de la Resolución 227 de 2022 del Ministerio de Salud y Protección Social, que a su vez reglamentó el Decreto 811 de 2021, permitiendo el uso de cannabis y de la planta en alimentos y bebidas alcohólicas.
El Invima precisó a Bloomberg Línea que para este tipo de productos la concentración de cannabinoides permitida es:
- THC: no podrán contener una cantidad igual o superior al límite de fiscalización señalado por el Ministerio de Salud y Protección Social, que corresponde al 0,2%.
- CBD: transitoriamente los alimentos y bebidas alcohólicas no deben contener CBD, por lo que su resultado analítico deberá ser no detectable.
Ya para la obtención de la autorización de comercialización, la entidad explicó que se deben seguir los mismos pasos que un alimento o bebida convencional, sin que se generen requisitos adicionales para los usuarios.
“Para el caso de alimentos, se debe cumplir con la reglamentación sanitaria aplicable para el alimento que se pretende registrar, además de lo dispuesto para el cannabis. Para el caso de bebidas alcohólicas, se debe atender a lo estipulado en el Decreto 1686 de 2012″, señaló a Bloomberg Línea.
En total, actualmente existen cuatro productos con cannabis como ingrediente que ya cuentan con autorización de comercialización del Invima.
Entre las compañías que ya cuentan con licencias destaca Flora Growth, que con su división Kasa Wholefoods logró el aval de sus atunes con esos ingredientes, uno de los cuales se presenta como trozos en aceite de cáñamo.
Entre tanto, la firma Nookdrinks obtuvo el aval para comercializar una bebida energizante con base en cannabis y la Sociedad de Comercialización Internacional Agrícolas Unidas obtuvo permiso para sus jugos o zumos de diferentes frutas con ese mismo ingrediente.
Mientras que la empresaria Mariela Galindo Torres obtuvo el registro sanitario para comercializar panes con diferentes ingredientes como frutos secos, café, chocolate y también cannabis.
El presidente ejecutivo de la Asociación Colombiana de Industrias de Cannabis (Asocolcanna), Miguel Samper Strouss, dijo a Bloomberg Línea que “el Ministerio de Salud tiene una oportunidad fantástica para proteger la salud de los colombianos e incentivar el consumo de alimentos funcionales o de bienestar”.
“Lo primero, porque hay un mercado enorme gris o ilegal de alimentos y bebidas con CBD que no se sabe cómo se producen, qué contienen ni si tienen o no efectos negativos en la salud. Lo segundo, porque el consumo de alimentos funcionales viene en aumento en Colombia y está demostrado que el CBD ayuda al organismo a cumplir mejor funciones como las desinflamatorias o a mejorar la concentración”, explicó.
“El llamado que le hemos hecho desde Asocolcana al Ministerio es claro: hay que proteger la salud de los colombianos regulando el mercado de alimentos y bebidas con CBD que ya existe, pero no tiene controles ni trazabilidad. Y, por otro lado, se les debe permitir a los colombianos acceder a estos productos bien hechos, seguros, para que se beneficien de las propiedades funcionales del CBD como ocurre en más de 50 países del mundo”, ahondó.