De acuerdo con el centro de investigaciones económicas citado, aunque estas medidas están alineadas con la agenda de transición energética y el desarrollo sostenible,
Otras de las medidas en este sentido son: triplicar la tarifa del impuesto al carbono e incluir al carbón dentro de la base gravable del impuesto, así como un cambio sustancial en la destinación de los ingresos de este impuesto.
Fedesarrollo, dirigido por Luis Fernando Mejía, indica que actualmente el 80% de estos recursos son transferidos al Fondo Nacional Ambiental, y el 20% se destinan al Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito, y que con la reforma, el 66% de los ingresos pasarían a formar parte de la unidad de caja del gobierno, manteniendo el 34% restante para los usos actuales.
Además, que según el gobierno,
el aumento en el impuesto al carbono tendría un impacto de 0,15 puntos porcentuales en la inflación y generaría recursos por aproximadamente $1,2 billones anuales. “Valoramos el aumento del impuesto al carbono, aunque es necesario analizar con más detalle sus efectos sobre la inflación y la actividad económica”.
Por otra parte, la reforma sube el IVA del 5% al 19% para los vehículos híbridos. Una decisión que, según Pedro Nel Quijano, presidente de Aconauto, entorpecería el efecto positivo de estas tecnologías, “está demostrado que, a mayor carga impositiva, en este caso a los vehículos híbridos, lo que se logra es menos ventas, es decir, menor recaudo”.
El dirigente gremial mencionó que el estancamiento del sector automotor lo que se necesita es una política decidida que reactive las ventas por medio de hacer los vehículos más asequibles al comprador, a través de reducir los impuestos.
En ese mismo sentido, Jaime Cabal, presidente de Fenalco (Federación Nacional de Comerciantes), dijo que esta propuesta solo es una muestra más de la incoherencia del Gobierno, “quien por un lado pontifica sobre la importancia de la descarbonización de la economía y la lucha contra el cambio climático y por otro lado
oprime con impuestos aquellas iniciativas que trabajan para lograr este objetivo”.
Explicó que un impuesto de esta magnitud afectará más al sector automotor, que hasta ahora, después de 18 meses de caída en las ventas, se está recuperando precisamente apalancado por los segmentos de híbridos y eléctricos.
“Es increíble que la respuesta al plan de choque que le hemos venido pidiendo al Gobierno sea poner más impuestos. Esto es otro mensaje de incertidumbre que aleja a los inversionistas, preocupa a los consumidores y definitivamente afecta a la economía y la generación de empleo”, agregó Cabal.