El fenómeno de El Niño tiene en riesgo por conflagraciones y derrumbes a varias zonas. Gobierno prepara un decreto de emergencia para mover recursos.
El incremento en las temperaturas y la baja lluviosidad han llevado a que el país enfrente una situación de riesgo de incendios forestales. De acuerdo con cifras de Ministerio de Ambiente, hay 583 municipios en alerta de conflagraciones y a cierre de la edición impresa de este diario del miércoles había cinco incendios activos, dos están controlados y otros tres están en proceso de control. Ahora bien, la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres señala que son 21 los activos.
Esto ha llevado al mismo presidente Gustavo Petro a promover un decreto de emergencia para manejar la situación. Por medio de su cuenta de X aseguró que “como hicimos con la época de inundaciones, habrá un decreto para desastre natural con el fin de mover recursos. Si la capacidad instalada no es suficiente se pedirá ayuda internacional”.
Solo en Bogotá y sus alrededores la Alcaldía informó que había cuatro incendios, uno en los cerros orientales, en la localidad de Sumapaz, cerca del relleno sanitario Doña Juana y en el Cerro del Cable. El primero de estos ya está controlado en 70% y podría extinguirse por completo en algunas horas.
Por este motivo se ha instalado un puesto de mando unificado en la capital, desde el que se está monitoreando y enfrentando la situación. La cartera de Ambiente informó que para manejar estas emergencias ambientales se han destinado cerca de $710.000 millones por parte del Gobierno central. De igual manera la contención de las conflagraciones ha requerido de 44.000 galones de agua, 170 máquinas de bomberos y 98 operaciones áreas para aplacar la extensión de los incendios.
Una de las alertas que se han emitido es que el periodo de sequía por el fenómeno climático podría extenderse hasta mayo, y en febrero podría darse el pico de temperaturas. Esto significa que en los próximos días se pueden presentar más emergencias relacionadas con incendios.
Ahora bien, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, afirmó que los riesgos relacionados con El Niño no se refieren solo a los incendios. Destacó que en total son 883 municipios que tienen alertas, de los cuales 47 presentan riesgo de deslizamiento y se han reportado 66 poblaciones con problemas de abastecimiento de agua.
El presidente Petro manifestó que los municipios “son incapaces” de generar sus planes de mitigación de riesgo climático, por lo que “la Nación debe tomar este papel (…) El plan de la Nación de apoyar con agua las decenas de municipios hoy sin agua está funcionando. Hasta ahora, hemos apagado centenares de incendios y la capacidad de compra de cosechas y su guardado está también funcionando correctamente”.
Además de los incendios en los alrededores de Bogotá se reporta un incendio en Nemocón, Cundinamarca, que según el alcalde del municipio, Cristian Carrillo, está fuera de control.
Alto riesgo en el agro por heladas
Y aunque el fenómeno de El Niño se manifiesta con las altas temperaturas, lo cierto en que en las zonas altas del país, como la Sabana o los departamentos de Boyacá y Cundinamarca, este se manifiesta por medio del descenso de temperaturas que pueden llegar a heladas y que afectan directamente a varios cultivos agrícolas de estos lugares.
De hecho, de acuerdo con el último boletín de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), el día de ayer en horas de la mañana se registraron temperaturas bajas en los municipios de Chiquinquirá, Ubaté, Lenguazaque, Fúquene y otros.
Las afectaciones se traducen en su mayoría en la subida de precios de los productos que se producen en estas zonas del país. Según lo dicho por la Corporación de Abastos de Bogotá (Corabastos), esta semana la baja calidad de hortalizas y verduras, como consecuencia de las heladas en la región, ha influido en los precios de la canasta familiar. Reiteraron que este no es el único problema que enfrentan los agricultores pues la falta de recurso hídrico, repercute en la calidad del producto comercializado.
“Los precios, comienzan a subir, sobre todo en el brócoli, cilantro, coliflor, la lechuga Batavia, ente otras. El cilantro ha llagado costar $50.000 el atado para el tendero de Bogotá. También, Gloria Sonsa, productora de hortalizas en el municipio de Tenjo, manifiesta que hace varios meses no llueve, es por ello que las cosechas que se han llevado a Bogotá han sido rechazadas por la calidad”, dice la Central.
