Destaca que el lugar y las condiciones en las que nace una persona en Colombia pueden determinar su futuro.
Colombia ha logrado avances significativos en la reducción de la pobreza, incluso tras el impacto de la pandemia de COVID-19.
Sin embargo, persisten profundas desigualdades en el acceso a oportunidades entre distintos grupos sociales y regiones del país y niveles de pobreza muy distintos.
El nuevo informe del Banco Mundial “Trayectorias: Prosperidad y reducción de la pobreza en el territorio colombiano”, destaca que el lugar y las condiciones en las que una persona en Colombia nace pueden determinar en gran medida su futuro, evidenciando la necesidad de abordar estas desigualdades para lograr un crecimiento inclusivo y sostenible.
Estas brechas se deben, en gran medida, a la desigual capacidad histórica del Estado para prestar servicios públicos de calidad en los distintos departamentos y municipios.
Estas desigualdades se traducen en menores oportunidades para muchas personas de acumular activos esenciales como educación, salud, tierras y vivienda, fundamentales para mejorar su calidad de vida.
Esta situación es más crítica en departamentos como La Guajira, Vaupés, Amazonas, Nariño y Guainía, afectando de manera desproporcionada a grupos vulnerables, como los pueblos indígenas.
El acceso limitado a estos activos con frecuencia lleva a menores oportunidades económicas, empleos de baja calidad y una movilidad social reducida. Al menos 30% de la desigualdad de ingresos laborales está determinada por circunstancias al nacer, con una fuerte relación entre el bienestar de los individuos y el de sus padres, especialmente en algunos departamentos.
“Este informe subraya la urgencia de abordar las profundas desigualdades que persisten en Colombia. Es esencial fortalecer las instituciones y mejorar el acceso a servicios de calidad en todo el territorio para asegurarnos de que todos los colombianos y colombianas, sin importar su lugar de nacimiento o donde vivan, tengan acceso a las mismas oportunidades”, dijo Peter Siegenthaler, Representante del Banco Mundial para Colombia. “Debemos trabajar juntos para que todos los colombianos puedan disfrutar de un bienestar más equitativo.”
Entre sus contribuciones, el informe presenta datos municipales detallados en diferentes áreas, incluyendo sobre la evolución de la pobreza monetaria, la mortalidad evitable en el área de salud, y la conectividad de los municipios con los centros económicos, destacando cómo el cambio climático puede aislar aún más a las áreas con baja accesibilidad.
De acuerdo con el informe, en Colombia, más de 16 millones de personas viven en pobreza.
En departamentos como La Guajira y el Chocó, dos de cada tres personas se encuentran en situación de pobreza, en comparación con una de cada tres personas en Boyacá y una proporción aún menor en Cundinamarca.
Aún en períodos de mayor reducción de la pobreza en el país, los municipios más pobres no lograron reducirla al mismo ritmo que los más ricos, lo que contribuyó al aumento de la brecha de bienestar entre territorios.
Los departamentos con mayores índices de pobreza tienden a tener una menor proporción de empleo formal, por debajo del 20 por ciento para departamentos como Nariño, Sucre, La Guajira y Cauca comparado con el 67 por ciento en Bogotá.
Además, destaca el informe, la pobreza de aprendizaje —esto es, que niños de 10 años no puedan leer y comprender un texto simple— superó el 95% en algunos municipios de Guainía y Amazonas.
Así mismo, en ciertos municipios, más del 85% de las muertes infantiles serían evitables con la atención adecuada, reflejándose un acceso desigual a servicios esenciales.
Las amplias distancias y la falta de infraestructura de transporte y conectividad limitan aún más el acceso para ciertas zonas del país.
El 21% de los municipios, que albergan aproximadamente a cuatro millones de personas, tienen una accesibilidad baja a los centros económicos o están aislados de las oportunidades que éstos pueden ofrecer.
Antes estos desafíos, los gobiernos subnacionales tienen un rol importante en contribuir a una mayor prosperidad en el territorio.
Sin embargo, enfrentan retos significativos en términos de generación de ingresos y gestión fiscal, y la limitada coordinación entre los gobiernos municipales puede restringir su capacidad para servir mejor a la población, sostiene el informe.
Estrategias para cerrar brechas
El informe introduce nuevas acciones que capturan los desafíos para cerrar las brechas, incluyendo una medida de movilidad social a nivel departamental que resalta las oportunidades desiguales de prosperar en diferentes regiones, y un índice de presencia del estado en el territorio que refleja las disparidades en la provisión de servicios públicos.
El informe destaca que, para para aumentar ingresos y oportunidades económicas es crucial invertir en activos y en el acceso a servicios de calidad, como educación, salud, formalización de la tierra, acceso a recursos financieros, así como mejorar la conectividad física y digital.
Esto, sobre todo en lugares más rezagados y con mayor población en pobreza, para fortalecer así su capacidad de prosperar.
Además, se requiere fortalecer las instituciones en todos los niveles de gobierno, mejorando la capacidad técnica y fiscal de los gobiernos subnacionales y fomentando la coordinación para lograr economías de escala en la prestación de servicios.
Finalmente, para su mayor efectividad, el diseño de políticas debe considerar la diversidad de necesidades y capacidades en todo el territorio, la importancia de la coordinación entre actores relevantes y ofrecer un paquete integrado de servicios para abordar diversas barreras a la reducción de la pobreza.
Información extraída de: https://www.bloomberglinea.com/latinoamerica/colombia/advertencia-del-banco-mundial-sobre-condiciones-que-definen-la-pobreza-en-colombia/